Érase una vez….
..el Señor Bianchi, de Varese. Su profesión de viajante de comercio le obligaba a viajar durante seis días a la semana, recorriendo toda Italia, al Este, al Oeste, al Sur, al Norte y al centro, vendiendo productos productos medicinales. El sábado regresaba a su casa y el lunes por la mañana volvía a partir. Pero antes de marcharse, su hija le recordaba.
-Ya sabes, papá: un cuento cada noche.
Porque aquella niña no podía dormirse sin que le contaran un cuento, y su mamá le había explicado ya todos los que sabía, incluso tres veces. Y así cada noche, estuviera donde estuviese, el señor Bianchi telefoneaba a Varese a las nueve en punto y le contaba un cuento a su hija.