Entradas Nick Lowe formato One man band en Santiago de Compostela
SANTIAGO DE COMPOSTELA en SALA CAPITOL
6 ABRIL 2013
APERTURA DE PUERTAS 20:30h. NICK LOWE 21:30h
Será en formato “one man band”. Él, su guitarra, su voz, sus canciones y su maestría. Maestría porque es un maestro (no puede ponerse en duda si se tienen orejas que funcionan) en el arte de la composición pop. En su caso, la de la extrema elegancia, la vista de la manera que la vista.
Un maestro en plena forma, sin ápice de óxido. Ya sabemos que puede ser alabado, recordado, referenciado, por muchos y variados motivos si tiramos de retrovisor. Por ejemplo, por producir los primeros cinco álbumes de Elvis Costello, considerados de lo mejor que ha publicado el marido de Diana Krall, que es mucho decir. O por haber compuesto varias canciones clásicas, tan “de toda la vida” como “What's So Funny About Peace, Love And Understanding” y “Cruel To Be Kind”, requeteversionadas. O porque su ex suegro Johnny Cash le pidió prestada su canción “The Beast In Me” para que ejerciera de epicentro del primer álbum, el de 1994, el del regreso acústico, a lo grande y de la mano de Rick Rubin, del hombre de negro.
Tanto le gustó a Mr. Cash esa canción que luego grabó varias composiciones más de su ex yerno. Sí, es cierto, Lowe puede ser citado por cosas que ya pasaron, pues esta figura centralísima del pub rock, el punk-rock y la new wave facturados en el Reino Unido luce una carrera con mucho juego si miras hacia atrás. Pero eso es tan cierto como también lo es afirmar que una de las etapas fundamentales de su trayectoria es la última, que sigue abierta y en presente de indicativo.
La que se inició en 1994 con el disco “The Impossible Bird”, inaugurando para el británico una sólida vía de reinvención como “crooner” maduro, fuente de palabras sabias. Y así sigue, canoso y sin despeinarse, con los dos últimos capítulos de ese período, “At My Age” (2007) y “That Old Magic” (2011), este último el que nos vendrá a presentar con más hincapie, fácilmente encajables entre los discos más exquisitos del último lustro. Vamos, que para hablar de Lowe hay que ponerse de pie.