DOLOREAN: Oriundo de Portland y fiel seguidor a la tradición musical local (que no localista), Al James ha necesitado casi cuatro años para dar con “The Unfazed” (Partisan, 2011), la continuación de “You Can’t Win” (Yep Roc, 2007), el disco que redefinió el fibroso y cálido sonido de Dolorean. Y lo ha logrado convirtiendo su música en la única forma de explicarse, entre el clasicismo pop-rock norteamericano, la poesía de Raymond Carver y una personalidad que vuelve a encenderse con unas nuevas canciones que aunan tradición y autenticidad, con toques de Bob Dylan, Bruce Springsteen, Red House Painters o Palace.
EL HIJO: Con “Madrileña” (Acuarela, 2010), el ex líder de Migala y Emak Bakia Abel Hernández ha desarmado el sonido de El Hijo junto a Raül Fernandez (Refree) para volver a levantarlo a empujones, dejando que cada nota encuentre un espacio donde reposar, para dar rienda suelta a un realismo casi mágico con el que dibuja los personajes de una ciudad tan sucia y luminosa como la que habitan sus canciones, entre el pop psicodélico y el costumbrismo folk.